En otro post anterior ya hablamos de qué hacer cuando se sale la cadena (enroscar el tornillo H cuando se sale por el desarrollo duro -hacia fuera- y L por el blando).

Antes de su mantenimiento comprobaremos que no es necesario cambiar la cadena. Con un medidor podemos saber si la cadena se ha elongado tanto como para cambiarla (0.75), incluso si la elongación ha sido tanta que habrá que cambiar también los piñones -sobre todo- y platos (1.0).

De no cambiar los piñones desgastados por dejar una cadena elongada, irá dando saltos durante el pedaleo. Hay cadenas para 1-3, 6-8 y 9 piñones

A la cadena nueva habrá que quitarle varios eslabones para que tenga la longitud justa. Hay varias formas de calcular la longitud de la cadena: una de ella es colocando la cadena en el piñón pequeño y el plato grande, debiendo estar la patilla del desviador trasero paralelo al suelo. Guardar los eslabones sobrantes por si se rompiera algún eslabón. 

Algunas cadenas vienen con un eslabón maestro y otras no. Necesitaremos un tronchacadena para quitar, colocar o darle la longitud exacta. La dificultad está en utilizar siempre el tronchacadenna presionando todo el pasador del eslabón. En la siguiente imagen se ve el error.

Si queremos abrir la cadena y después volver a colocarla, no debemos sacar todo el pasador, sino que deberemos dejarlo en la cara externa del eslabón para que después nos sirva de guía al volverlo a colocar, de lo contrario será imposible volverlo a meter.

También hemos hablado de la necesidad de su mantenimiento, en primer lugar su limpieza: con un trapo la limpiamos la cadena, también los piñones y platos y sobre todo las poleas del desviador trasero. Cuando la suciedad está muy unida a la grasa, habrá que desengrasar. Posteriormente se lubricará con aceite específico (no con aceite de oliva, 3 en 1, etc.), ideal con aceite con teflón. Siempre que llueva, la limpiemos con agua o le caiga barro, secar y lubricar o de lo contrario nos la encontraremos oxidada.