Esta es una pregunta muy común entre la mayoría de las que se acercan al pedaleo. Lo primero, que uno se debería preguntar es: ¿para qué quiero la bicicleta? Un error muy común es comprar una bicicleta de MONTAÑA para utilizarla en desplazamientos urbanos, aunque también puede valer.
Desde el punto de vista de un ciclista urbano, existen las bicicletas de CIUDAD que se caracterizan en su diseño por llevar la espalda recta (comodidad), tener unas ruedas grandes (en vez de 26 de 28 pulgadas), incorporar dinamos para iluminar y es muy frecuente llevar un transportín donde incluir, por ejemplo, la compra diaria. Recientemente hemos visto el auge por las PLEGABLES. No te ocupan mucho espacio y puedes tenerla en un rincón de la casa, subirla en ascensores, llevarla al trabajo, subirla fácilmente al coche o a un transporte público. Otra alternativa, compatible con las de ciudad y las plegables, son las ELÉCTRICAS, que te permiten superar las pendientes, evitar llegar sudado a una cita más formal. Por contra, la batería hace que la bicicleta pese más. No se puede tener todo.
Desde mi experiencia personal, me di cuenta que aunque me gustaba darme mi paseo de fin de semana por la (Pista de Carros, desde Beni-Enzar hasta Rostrogordo) y muy de vez en cuando por Marruecos en pistas muy accesibles, la mayoría de mis desplazamientos diarios eran al trabajo. Por eso elegí una HÍBRIDA, que pensada para el
cicloturismo y excursiones de varios días, combinaba cosas de la bicicleta de ciudad con la de montaña. Un modelo que incluye una amortiguación delantera como las bici de montaña, pero que se puede bloquear cuando voy en ciudad (es un horror subir una cuesta con amortiguación muy blanda); el manillar es como una bicicleta de montaña, pero que te permite subirlo o bajarlo de manera muy fácil (lo llevo alto para
ir más cómodo); tiene un sillín de gel que viene fantástico para desplazamientos cortos y sin llevar cullote con badana; una dinamo en el buje de la rueda para no acordarme de las pilas que me parmite iluminar tanto la parte delantera como trasera, con la posibilidad de mantener iluminada la parte trasera durante un rato por si estoy
parado en un semáforo; guardabarros, no tanto para el barro, si no para que no te salpique en la vestimenta la suciedad que acumula el asfalto; un transportín al que añadirle las alforjas. Además su coste estaba muy ajustado: 400 euros, aunque a los principiantes esta cantidad les pueda parecer elevada, una bici que valga menos de 200 euros no es de garantía.
Propuestas y dudas en los comentarios.
para mi lo ideal es comprar una bicicleta usada de corredor con componentes de aluminio las encuentras baratas. le pones un manillar tipo clasica un transportin y si quieres unos guardabarros la personalizas con pintura y tines una bicicleta chula rapida y ligera yo tengo tres de este tipo y son las que uso habitualmente.
Es muy buena opción. Me consta que lugares donde hay muchos clubes y competiciones, a los corredores le regalan bicis cada año y si tienes la suerte de conocerlos o estar en el mundillo, puedes apañarte una bici muy interesante. En Melilla se que lo hacen con las bicis de carreras que se les quedan antiguas. No obstante sigue dominando el ciclista de maillot, cullote, amateur, etc., y puede que cambiar el manillar o poner transportín no lo vean puesto que no suelen utilizar la bicicleta como transporte cotidiano.
Feliz año nuevo a todos:
yo he cogido mi antigua orbes de Carreras y he hecho lo que comentáis. Me queda el manillar pues me ha sido prácticamente imposible encontrarlo, pero por lo demás es mas comoda, la ruedas mas grande, y le he adaptado el trasportin.
Inconveniente? El cambio que lo seguimos teniendo en la barra, pero la verdad es que queda bastante bien.
Cuando la tenga la llevaré a la pedalada.
Me gustaría que viérais esta noticia, es interesante que veamos también los contras.
http://www.bbc.co.uk/mundo/cultura_sociedad/2010/01/091229_video_bicis_paris_ig.shtml
En Sevilla también han tenido este problema, aunque a menor escala y dando soluciones. Está claro que la implantación de un modelo, en este caso de movilidad, no se basa simplemente en gastar y sacar la foto. Debe haber un plan en el que se unen: educación, fomento, medio ambiente (y el otro medio)… y todo ello con estrategias de éxito.
¿Posible en Melilla? Sí. Solo los necios creen que el mundo es como ellos.
las posibilidades en Melilla de que suceda lo de París están ahí … pero si no se presenta una alternativa… qué esperamos de lo que nos viene en la ciudad !!!!!!!